Con el frío que hace fuera y la calefacción haciendo todo lo posible para mantenerte cálida cuando estás en casa, tu piel puede resecarse y escamarse rápidamente. Los baños calientes típicos del invierno y beber menos agua durante el día hace que la piel de tu cuerpo pierda la batalla de mantenerse flexible. ¿La solución? Incorporar una buena leche hidratante corporal a tu rutina de belleza diaria para mantener la piel hidratada, suave y sin escamas durante toda la temporada invernal.
Las leches corporales acondicionan y suavizan profundamente la piel deshidratada sin que la notes espesa o grasienta, lo que la convierte en la elección perfecta para aquellas que odian pasar horas hasta que una crema normal es absorbida por la piel.
Indicada específicamente para el cuerpo
Las leches corporales como las que puedes encontrar en Herbocosmética tienden a tener un mayor contenido de agua, por lo que generalmente tienen una textura más ligera y son más fáciles de absorber. Sin embargo, debido al alto contenido de agua, las lociones no son tan duraderas como otras cremas.
Son más que un simple humectante y no deben ser usadas por aquellas que tienen la piel muy seca. Las leches son mejores como un humectante diario para la mayoría de los tipos de piel.
También es ideal si vives en una zona con clima cálido y húmedo, o estás buscando una buena hidratante para el verano. La mejor forma de aplicarla es después de ducharse o de darse un baño.
No debe utilizarse como crema de cara debido a los siguientes aspectos:
- La piel de tu cara es mucho más delicada que la de tu cuerpo. Esto se debe a que la piel de tu cuerpo tiende a reemplazar las células a un ritmo mucho más lento que las de tu cara, ya que no está tan expuesta a factores ambientales como el rostro. Esto es lo que hace que la piel de tu cuerpo sea más gruesa y la de tu cara más delgada (y delicada).
- Causa poros obstruidos y acné: Las leches corporales son normalmente mucho más aceitosas que las lociones para la cara porque la piel del cuerpo tiende a ser más seca. Están formuladas con humectantes más pesados como vaselinas o aceites minerales, que proporcionan una excelente barrera para evitar que la piel pierda humedad y protegerla mejor contra las condiciones más duras. Sin embargo, estos tipos de humectantes pueden ser demasiado para la cara, pueden obstruir los poros y causar acné. No es el caso de las cremas hechas especialmente para la cara, ya que no engrasan demasiado la cara.
Utiliza sólo leche corporal natural y de calidad
Procura adquirir leche corporal de calidad, ciertas marcas masivas tienen productos baratos cuyo contenido tiene muchos más productos químicos. Aunque pueda parecer ligera en textura, no debes usarla, mucho menos en la cara ya que algunos de los ingredientes presentes en ella pueden causar una reacción alérgica. Usualmente tienen más fragancias, colorantes y aditivos para ayudar a penetrar en la piel. Estos aditivos pueden ser dañinos para la piel y causar efectos secundarios como:
- Brotes de acné
- Obstrucción de los poros
- Picazón en la piel
- Exceso de secreción de grasa
- Piel grasa
- Otras alergias