Cada pecho es diferente y no todas las cirugías de aumento de mamas son iguales.
La mama está formada por tejido graso, tejido glandular, conductos lácteos, vasos sanguíneos, nervios y conductos linfáticos, recubiertos de piel. Debajo de la mama se encuentra el músculo pectoral mayor. Un implante mamario se puede colocar ya sea parcialmente por debajo o por encima de este músculo, dependiendo del grosor del tejido mamario y de su capacidad para cubrir adecuadamente el implante mamario.
Es el tejido graso lo que da la apariencia exterior al pecho. La forma también depende de la elasticidad de la piel. Los senos jóvenes están compuestos de mucho tejido glandular y poco tejido graso, lo que los hace firmes. El tejido glandular deja paso gradualmente al tejido graso, que es mucho menos firme. Es por eso que los pechos se vuelven un poco más flácidos con el paso del tiempo. El embarazo y la lactancia también afectan la forma de los senos. A medida que envejecemos, la gravedad hará que la parte superior de sus senos se vacíe, lo que significa que los senos caen más. Las mamas no contienen tejido muscular, por lo que no tiene sentido hacer ejercicio para agrandarlas o realzarlas.
¿Cómo se colocan los implantes?
A la hora de realizar esta popular cirugía plástica, el implante mamario se inserta ya sea debajo del tejido mamario (sub glandular) o debajo del músculo pectoral mayor (sub pectoral). La incisión para la inserción se hace típicamente en el pliegue de la piel debajo del seno, alrededor de la areola (el área alrededor del pezón); en casos raros se practica en la axila.
Diferentes formas de implantes mamarios
Debido a que cada mujer es única, antes de proceder a una operación de aumento de pecho, los implantes también existen en diferentes formas y tamaños. Algunos implantes son redondos, mientras que otros tienen forma de gota de agua, que se asemeja mucho a la forma natural de un seno.
Implantes redondos
Los implantes redondos rellenan el tejido mamario existente añadiendo volumen, particularmente en la parte superior de la mama, lo que da como resultado un aspecto «redondeado».
Implantes anatómicos
Los implantes anatómicos o «de gota» tienen una forma más natural para seguir las líneas naturales del cuerpo. Éstos implantes rellenan el tejido mamario existente aumentando sutilmente la parte superior de la mama mientras que añaden más volumen a la parte inferior de la mama.
Ambos tipos de implantes pueden aumentar el tamaño de tus senos. Depende de ti qué forma prefieres para lograr la apariencia que deseas.
Tu cuerpo en equilibrio
Una vez que has elegido una forma en particular, la siguiente pregunta es: ¿Qué tan grande quieres que sean tus senos? Probablemente elegirás una talla que complemente tu figura. La mayoría de las mujeres quieren el pecho más firme y completo del que solían tener, o siempre quisieron, pero nunca desarrollaron, en proporción a su figura.
Muchas mujeres piensan en el tamaño de sus pechos en términos del tamaño de la copa del sujetador. Pero también puedes tener ideas sobre cómo minimizar el espacio entre los dos pechos y cómo puede poner sus senos en armonia con la forma general del cuerpo. Es importante hablar con tu cirujano sobre lo que tienes en mente para que pueda tener en cuenta tus expectativas cuando seleccione el tamaño y la forma del implante.
Un aspecto natural
Para un aspecto natural, probablemente querrás que tus nuevos senos estén en equilibrio con tu cuerpo como un todo. El ancho del pecho, la altura y la proyección son consideraciones importantes. La anchura de los pechos es lo que determinará el espacio entre los dos senos (canalillo). La anchura del pecho también determina la curvatura externa de los senos, un contorno que es esencial para el equilibrio de la proporción entre el pecho y las caderas.
Discutir tus preferencias personales en cuanto a la anchura, altura y proyección de los senos puede ayudar a aclarar al cirujano plastico la forma y el tamaño ideal para sus nuevos senos.